Resumen
- La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, fue electa como la nueva dirigente nacional de Morena.
- Otro de los nombramientos fuertes durante el Congreso Nacional fue el de Andrés López Beltrán, hijo del actual presidente de México, como el secretario de Organización del partido.
- Luisa María Alcalde aseguró que no le fallará a los morenistas, ni tampoco al pueblo de México. El cargo dentro del partido lo asumirá el mismo día de la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta.
Luisa María Alcalde toma las riendas de Morena
Los resultados de la renovación de la dirigencia nacional de Morena eran previsibles desde hace algunos meses. Luisa María Alcalde, actual secretaria de Gobernación, había expresado su deseo de contender por la presidencia nacional del partido. Sin oposición alguna, la política de 37 años acaba de confirmar que su carrera en la vida pública marcha a un ritmo meteórico. En los próximos años, liderará desde lo más alto a la fracción dominante.
Luisa María Alcalde asumirá como dirigente nacional de Morena el 1 de octubre de 2024, misma fecha en la que Claudia Sheinbaum tomará posesión de la Presidencia de la República. Desde su llegada al recinto, podía percibirse que saldría de esa puerta con una victoria en la bolsa. Además, estará acompañada de cerca por otra Millennial de alto perfil, Carolina Range Gracida, que fue electa como secretaria general del partido.
Al tomar la palabra, Alcalde anunció que pasará un decálogo a todos los gobiernos de Morena que tendrán que cumplir de forma cabal. Entre ellos, se encuentran compromisos como nunca usar la fuerza pública para la represión de la sociedad y, solamente, para combatir al crimen organizado. La funcionaria federal afirmó que siente una profunda responsabilidad de continuar con el legado de Andrés Manuel López Obrador.
“…el presidente López Obrador va confiado a Palenque a su merecido descanso. Y a seguir luchando desde ahora el escritura se va a Palenque tranquilo del deber cumplido y confiado que en el relevo generacional del movimiento en manos de la presidenta electa no le falló al pueblo de México. Tampoco podemos fallarle al pueblo que decidió por la continuidad y por el tiempo de mujeres, que decidió por Claudia Sheinbaum en Morena. No podemos fallarle a ella”.
¿Quién es Luisa María Alcalde?
Luisa María Alcalde es una política mexicana nacida en la Ciudad de México en agosto de 1987. Pese a su relativa juventud, su familia y ella misma está asociada a la fundación del partido Morena. Su madre es Bertha Luján, quien estuvo a cargo de la Contraloría del Gobierno del Distrito Federal durante la administración del entonces jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador.
Ella es licenciada en Derecho con Mención Honorífica por parte de la casa de estudios más prestigiosa del país, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). También tiene una maestría en Derecho por parte de la Universidad de California en Berkeley.
Desde su juventud, estuvo vinculada a la figura de López Obrador por un tema ideológico. Eso fue evidente cuando participó en las protestas electorales tras la elección presidencial de 2006. En 2011, se afilió a la entonces asociación política Movimiento Regeneración Nacional. Allí hizo tareas como representante de jóvenes y estudiantes. Solo un año después, fue electa diputada federal por Movimiento Ciudadano, cargo que desempeñó hasta 2015.
Cuando Obrador llegó a la Presidencia de la República, Luisa María Alcalde se integró de inmediato al Gabinete Federal como titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. Ella desempeño ese puesto hasta mediados de junio de 2023, ya que ascendió al cargo de Secretaria de Gobernación en sustitución de Adán Augusto López. Ahora, está a días de tomar las riendas de Morena a nivel nacional.
Reflexión Editorial: Luisa María Alcalde llega a Morena en un momento de gracia
Luisa María Alcalde se desempañará como dirigente nacional de Morena en el mejor momento del partido político en su historia. En definitiva, esto es una ventaja, pero también una enorme responsabilidad. Como cualquier otro partido en el poder, Morena enfrenta retos mayúsculos y compromisos importantes ante la población. Ella será una pieza clave para consolidar al partido o, en su defecto, será señalada como al dirigente con la que empezó la debacle.
En su discurso, Alcalde hizo varias referencias a López Obrador, lo que exhibe un apego cercano a la ideología y los principios del presidente.
“…pronto se cumplirá la profecía de Andrés Manuel López Obrador. México tendrá a la mejor presidenta del mundo y Morena seguirá su rumbo, se convertirá también en el mejor partido del mundo. Ni más, ni menos (…) Somos herederos de las luchas de nuestro pueblo y hoy tenemos un México más justo y democrático, pero debemos evitar que nos volvamos presas de la soberbia y, por tanto, no podemos traicionar la confianza de los ciudadanos”, señaló.
Estas palabras de Luisa María Alcalde son significativas como futura dirigente nacional de Morena. En lo personal, me gusta la parte en la que exige a los políticos del partido no volverse soberbios por su dominio aplastante en varias instancias de gobierno, tanto a nivel federal como estatal y municipal. Ella tiene claro que la fracción política debe mantenerse sobre la línea de humildad y cercanía al pueblo marcada por el todavía mandatario Andrés Manuel López Obrador.
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