Imagina despertar en un país donde los niños no pueden ir a la escuela por la inseguridad. Esa esa la realidad de Ecuador en este momento. Las autoridades han tenido que adoptar medidas para evitar una tragedia. La nación sudamericana decidió que lo mejor era que la comunidad estudiantil no acudiera a las aulas. Ecuador anunció la suspensión de las clases presenciales debido a la ola de violencia.
La instrucción del Gobierno ecuatoriano es aplicable para todo el país. El plan actual establece que el regreso a los salones de clases tendría lugar hasta el próximo 12 de enero. La decisión de no celebrar actividades académicas normales fue una jornada violenta en el territorio. Los reportes advierten sobre ataques armados, quema de automóviles, secuestro de agentes de la Policía e ingreso a un canal de televisión en la ciudad de Guayaquil.
¿Qué dijo el presidente Daniel Noboa sobre la situación?
Este martes, el presidente Daniel Noboa declaró la existencia de un conflicto armado interno. En su mensaje, convocó al Ejército y las fuerzas del orden público a restablecer el orden en las calles del país. El mandatario dijo que la nación enfrenta una crisis de seguridad, por lo que giró instrucciones para tomar acciones contundentes contra las células de varios grupos del crimen organizado trasnacional.
En su cuenta social de X, Noboa señaló:
“He ordenado a las Fuerzas Armadas ejecutar operaciones militares para neutralizar a estos grupos (…) He firmado el decreto ejecutivo declarando Conflicto Armado Interno e identifique a los siguientes grupos del crimen organizado trasnacional como organizaciones terroristas y actores estatal beligerantes: Águilas, ÁguilasKiller, Ak47, Caballeros Oscuros, ChoneKiller, Choneros, Covicheros, Cuartel de las Feas, Cubanos, Fatales, Gánster, Kater Piler, Lagartos, Latin Kings, Lobos, Los p.27, Los Tiburones, Mafia 18, Mafia Trébol, Patrones, R7, Tiguerones”.
Este llamado que reconoce la existencia de un Conflicto Armado Interno ocurre solo un día después de que el mandatario ecuatoriano decretara un Estado de Excepción por un periodo de 60 días en todo el territorio por la gravedad de la crisis carcelaria y de seguridad.
En las horas previas, la situación de seguridad se volvió insostenible tras la fuga de la prisión de uno de los líderes criminales más poderosos y temidos de Ecuador, Adolfo Macías Fito. Asimismo, se reportaron motines en al menos seis cárceles del país, en las cuales los guardias de seguridad fueron tomados como rehenes por parte de los prisioneros.
En horas anteriores, el presidente ordenó una fuerte movilización armada de al menos 3,000 elementos del Ejército y la Policía para intentar recapturar al líder criminal. Acorde con el secretario de Comunicación del Gobierno ecuatoriano, Roberto Izurieta, existía un plan en marcha para trasladar al Fito a una cárcel de máxima seguridad. El capo se habría enterado de ello y, por ende, habría organizado con éxito su plan de fuga.
Suspensión de actividades presenciales
Ecuador se encuentra sumido en un clima de hostilidad, violencia y crimen. La gente tiene miedo de salir a las calles por los recientes ataques indiscriminados. Continúan los reportes de coches con explosivos, así como el bloqueo de caminos y otro tipo de actos que ya han sido calificados como terroristas. La suspensión de clases en Ecuador por la violencia, así como de otras actividades en la vida pública y la industria privada, está más que justificada.
Varios locales del centro de Guayaquil evacuaron a sus empleados y cerraron sus puertas ante los hechos violentos. Mientras tanto, elementos del Ejército se encuentran en vigilancia permanente de zonas estratégicas, como lo es el Metro de Quito. Existe el temor de que las organizaciones criminales puedan instalar explosivos en alguno de los vagones o en otras áreas de alta concurrencia.
La Asamblea Nacional tampoco está celebrando sus reuniones legislativas con normalidad, ante el riesgo de que se perpetren ataques armados o que se perpetren secuestros contra legisladores.
La comunidad internacional externó su solidaridad y respaldo hacia el pueblo ecuatoriano. Países como Colombia, Perú y Paraguay externaron su preocupación por la situación de emergencia por la que atraviesa la nación ecuatoriana. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia envió un mensaje de solidaridad a las víctimas, además de que manifestar su apoyo a las legítimas autoridades del país para que puedan restaurar el Estado de Derecho.
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